Durante seis años he sido víctima de denuncias falsas por dos delitos sexuales que no cometí. Fui juzgado a 19 años de prisión. Me destrozaron la vida. Este último año lo pasé en prisión preventiva sin poder ver a mis hijos. Un amigo me recomendó acudir a Madrid al despacho penalista Ospina Abogados y no pude hacer mejor elección. Necesitaba al mejor abogado penalista. Juango y Beatriz demostraron mi inocencia en el Tribunal Supremo y ahora vuelvo a ser libre para poder ver a mi familia. No existen palabras suficientes de agradecimiento.