El conductor había sido condenado por la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Madrid a la retira de carnet de conducir por conducir supuestamente bajo las influencias del alcohol.
Ospina aclara que hubo un error en la valoración de la prueba por parte del Juzgado de lo Penal de Getafe.
La Audiencia considera que la declaración de los 3 policías municipales que acudieron al acto del juicio oral no era prueba de cargo válida, y que además existían "severas contradicciones" en sus declaraciones, hasta el punto de que los mismos "no se acordaban de cómo se desarrollaron los hechos". "Ante tales contradicciones e incongruencias", los magistrados entienden que ha de dictarse una sentencia absolutoria.