El Juzgado de lo Penal nº 14 de Madrid ha dictado sentencia absolutoria sobre R.L. acusado de cometer fraude fiscal por impago del IVA de la empresa constructora para la que trabajaba.
La Agencia Tributaria entiende que no se había cometido el delito fiscal del que se le acusaba, retirando la pena de 2 años y 6 meses de prisión y el pago de 352.000 euros.
La defensa del acusado estuvo a cargo del abogado penalista Juan Gonzalo Ospina y su bufete de abogados líder en delitos económicos.
Ospina Abogados argumentó en su defensa penal que su cliente no era el obligado tributario, por lo que era imposible que fuese juzgado como autor del delito. Por su parte, el Ministerio Fiscal, en su escrito de acusación, consideró a R.L. como la persona responsable de realizar las liquidaciones tributarias. La Agencia Tributaria interpuso querella por considerar que los hechos eran delictivos conforme el artículo 305.1 del Código Penal.